Llámame Shotti
CallMeShotti
Bio
Shotti (abreviatura de CallMeShotti) nació y creció en Filadelfia (Pensilvania) y estaba destinado a dedicarse a la música. Inspirado por su padre, que era rapero, Shotti tomó la pluma por primera vez a los ocho años. A los catorce años, ya habÃa pisado un estudio de grabación por primera vez y terminó el noveno grado con una visión que lo ayudarÃa a superar los altibajos de la vida.
Shotti creció en Uptown antes de mudarse a Olney durante el octavo grado, y su entorno jugó un papel muy importante en la formación de su música y su mentalidad. En Central High School, era un "solitario popular", conocido por todos, pero que se sentÃa cómodo en la soledad. Después de ser expulsado en el décimo grado, Shotti recibió educación en casa durante el resto de ese año y luego completó su educación en Simon Gratz Mastery Charter High School, donde se graduó. Estas experiencias formativas influyeron en las narrativas que se encuentran en su música, que cuenta la historia de la lucha personal, el crecimiento y la supervivencia.
A versatile artist, Shotti has written over 200 songs, crossing multiple genres, including Hip-Hop, R&B, Pop, Soul, and Afrobeat. His music is 100% inspired by real events and emotions from his life: the wins, losses, happiest moments, and heartbreaks. He pours everything into his art, using it as a personal release for thoughts and experiences too private to share otherwise. To date, Shotti has released three albums, 15 singles, and four EPs, collaborating with several artists such as Lil Ki From Jerome, Lul Naj, D. Lo, and many others. Recording primarily at Homeroom Studios since 2020, Shotti's evolution as an artist continues, with each song more personal than the last.
Not only are Shotti’s lyrics deeply reflective of life in the streets of Philadelphia, but they also convey universal themes of pain, betrayal, love, resilience, and survival. Tracks like *Tomorrow*, *Who Ain’t*, and *On My Mind* explore emotional turmoil, broken trust, and self-reflection, while songs like *Paraphernalia* and *Lies* delve into the harsher realities of street life, loyalty, and retaliation.
Filadelfia corre por las venas de Shotti y su amor por la ciudad es evidente. Es un fanático de los Eagles de pies a cabeza, nunca se pierde un partido y cree que LeBron James es el mejor jugador de baloncesto de todos los tiempos. Cuando no está trabajando en su música o viendo deportes, a Shotti le gustan las pelÃculas (en particular las de acción, comedia, suspenso y terror) y también es fanático del anime, con *One Punch Man* y *Mashle* encabezando su lista de favoritos. A pesar de su apetito exigente, los cereales Trix y la pizza de "Old English" en la calle 5 de Filadelfia ocupan un lugar especial en el corazón de Shotti.
Aunque es un hombre socialmente ansioso y no siempre le gustan las grandes multitudes, la energÃa de Shotti es contagiosa para quienes se acercan. Criado principalmente por mujeres, tiene un profundo respeto y comprensión por ellas, algo que se refleja tanto en su vida como en su música. Shotti, emocionalmente inteligente y sabio más allá de su edad, refleja una compleja dualidad: fuerte pero sensible, seguro pero cauteloso, siempre dispuesto a expresar a través de la música lo que no puede decir en voz alta.
A pesar del peso emocional de su música, Shotti sigue firme en su ambición. Su principal objetivo es que su música no solo se escuche, sino que se sienta. Quiere que los oyentes aprendan, presten atención y se inspiren con los mensajes de sus canciones. Su afán por la autenticidad surge de una vida vivida al borde de la vulnerabilidad y la fortaleza, utilizando la música como una válvula de escape y un puente para conectarse con otras personas que podrÃan sentir el mismo dolor.
Más allá de la música, la trayectoria de Shotti ha tenido muchos giros. Pasó un tiempo sirviendo en la Fuerza Aérea de los EE. UU. desde abril de 2021 hasta agosto de 2023, destinado en la Base de la Fuerza Aérea McGuire en Nueva Jersey. Sin embargo, ese capÃtulo llegó a su fin después de una serie de desacuerdos con sus superiores racistas, ya que Shotti se sintió perseguido y tratado injustamente. Esto finalmente llevó a que Shotti fuera separado administrativamente por una tardanza menor. Desde entonces, ha estado trabajando duro, haciendo tareas domésticas, Uber Eats, trabajo de seguridad y otras empresas para financiar su carrera musical y su estilo de vida.
Con la vista puesta en el reconocimiento mundial, la pasión de Shotti por la música no tiene lÃmites. Aspira a seguir creando, conectando y, en última instancia, dando a conocer su nombre en todo el mundo, asegurándose de que cada oyente encuentre inspiración, comprensión y una parte de sà mismo en el arte que crea.